El Albacete tiene muy complicado seguir en LaLiga SmartBank. Es una realidad. A falta de nueve partidos, el equipo está a seis puntos de la permanencia y aún hay algunos equipos que tienen un partido menos. Sus probabilidades disminuyen con el paso de las jornadas.
Al equipo de Alejandro Menéndez no le sale nada bien. Este domingo le plantó cara al todopoderoso Espanyol, que recuperó el liderato a expensas de lo que haga el Mallorca, pero la mala suerte primero, y el único despiste en defensa después, desequilibraron un magnífico encuentro entre dos iguales.
No porque luchen por lo mismo ni estén próximos en la tabla, de hecho tienen objetivos antagónicos y son líderes y últimos, pero el Albacete, pese a todo, logró competir de tú a tú frente a un equipo construido para subir a Primera División y con jugadores de la talla de Raúl de Tomás, Adrián Embarba o Diego López.
Sobre todo durante una primera mitad en la que el cuadro manchego tuvo varias ocasiones para marcar, pero Alfredo Ortuño le puso fin a su racha goleadora con un cero ante el Espanyol, todo lo contrario que Raúl de Tomás. Tomeu Nadal cometió penalti sobre Adrián Embarba y detuvo el lanzamiento desde los once metros del delantero madrileño, que aprovechó el rechace para abrir la lata a placer.
Los 'pericos' tuvieron sus opciones para marcar, pero el 0-1 fue el reflejo de lo acaecido en el Carlos Belmonte: los blancos no puntúan ni queriendo. Tras el paso por los vestuarios, con la mínima ventaja en el marcador, los de Vicente Moreno, entonces sí, impusieron su dominio en el centro del campo y echaron el partido a dormir.
El líder hizo de líder
Después de que Óscar Gil se marchara lesionado, el Espanyol aumentó distancias en el único error de los locales en defensa. Adrián Embarba sirvió desde el córner y Fernando Calero, sin oposición, cabeceó a las mallas. A Tomeu Nadal se le cayó la portería encima y Eddy Silvestre perdió la marca. Todo mal.
Menéndez puso toda la carne en el asador y entraron Cedric y Zozulia, pero entonces llegó la enésima pista con la que el combinado manchego podía imaginarse el resultado con el que se llegaría a la conclusión. Álvaro Jiménez, la principal arma ofensiva del Albacete, se fue lesionado tras una acción fortuita con Calero.
Y entonces sí, los 'pericos' apostaron por posesiones largas, por mover al entonces conocido como el 'Queso Mecánico' y por dormir el ritmo del choque. En la última del partido, Raúl de Tomás firmó el segundo de su cuenta particular tras un gran centro de Dídac Vilà desde la izquierda.
El Espanyol, a expensas de lo que haga el Mallorca, recupera la primera posición de LaLiga SmartBank; el Albacete, con nueve jornadas por delante, pone un pie en la Primera RFEF.