Rebelde y 'crack' son los dos términos que se ajustan a Marco Ruben después de su actuación en la victoria por 2-1 de Rosario Central frente a Racing en la Liga Argentina. Primero, llamó mucho la atención porque hizo caso omiso a su técnico, Kily González, cuando este, con el marcador en 1-1, iba a sustituirle.
Se trata de algo que ya había hecho antes su compañero Vecchio. En esta ocasión, el estratega pretendía retirarle del terreno de juego cuando el luminoso abrigaba un 1-0 favorable. Terminó consiguiéndolo, pues su pupilo le hizo caso, pero lo que no esperaba era que fuera a afrontar el mismo problema un rato más tarde.
Faltaba poco para el 80' cuando Marco Ruben vio cómo, desde el banquillo, su entrenador le indicaba que debía abandonar el césped. Con un gesto, le respondió que esperara un poco porque se veía en condiciones de ser clave. Demostró que tenía razón cuando, prácticamente en la siguiente jugada, batió al cancerbero rival.
Con la satisfacción del deber cumplido y dos minutos después de celebrar con euforia su diana, sí que hizo lo que Kily González le pidió y se marchó a descansar para los últimos compases del enfrentamiento. Estos acogieron una atmósfera de calma tensa en el elenco local, que subió la guardia y amarró los puntos.
October 24, 2021