El ejemplo de apostar por la casa en tiempos de bonanza

Ocho años después, el Celta de Vigo volverá a la Europa League. Lo hará con un proyecto de la casa desde el banquillo al once, donde un grupo de chavales bien guiados no se han conformado con solo jugar bien. También se han puesto a ganar, ganar y ganar hasta devolver a los celestes al fútbol continental.
Tras de varios años coqueteando con el descenso, el chip cambió cuando se dejó de mirar al talento de fuera para explotar el de casa. Cuando se acabó la dependencia absoluta de Iago Aspas, quien sigue siendo crucial, para crear un conjunto trabajadísimo sobre el manual del mentor de más de uno y de dos, Claudio Giráldez.
Cuando un proyecto es tan poco de individuos concretos, el foco se acaba poniendo en el entrenador. Claudio Giráldez fue como el día y la noche con Rafa Benítez, al que sustituyó en marzo de 2024 con el equipo al borde del descenso. A su llegada logró resultados inmediatos que resucitaron al Celta, sumando 23 de 30 puntos posibles, y a partir de ahí empezó a construir sobre una idea clara con sus chicos, a los que subió a Primera RFEF y estuvo a punto de ascenderles a Segunda en el Celta Fortuna.
Se suele decir en el fútbol que la cantera solo florece en momentos de crisis. Pero aquí se ha apostado por ella como base, no como parche. Javi Rodríguez, Damián, los Hugos (Sotelo y Álvarez), Pablo Durán, Fer López o un Alfon rescatado a los 26 años del barro han tenido sus distintas cuotas de protagonismo en el equipo de Giráldez, que ha crecido alrededor del 3-4-3. Ahí hay que destacar a los que estaban como el eterno Iago Aspas, Fran Beltrán, Guaita o un Starfelt en crecimiento. Pero también a Borja Iglesias, renacido en casa, o dos jugadores capitales para el sistema como Óscar Mingueza y Marcos Alonso.
Es muy difícil destacar a un único jugador de este RC Celta porque ha sido un equipo coral, pero muchos coincidirán en lo que ha sido Marcos Alonso esta Liga. El defensa, defenestrado en Barcelona, llegó como agente libre y fue un acicate perfecto para la defensa celeste por su experiencia jugando en una línea de tres centrales.
Defensivamente, un muro. Con balón, clave en la salida, progresando y generando superioridades en la medular junto a la línea de centrocampistas. Además, ha cogido galones y hasta ha terminado tirando los penaltis en las ausencias de Iago Aspas. Sus números, 2.835 minutos repartidos en 33 partidos, 31 como titular, y cuatro goles.
Por supuesto, no se pueden quedar sin mencionar jugadores que también tuvieron un rendimiento muy alto, como el versátil Mingueza, un renacido Borja Iglesias o una cantera más que interesante en las botas de Alfon, Fer López o un Sergio Carreira de vuelta al equipo para lucar.
Jonathan Bamba llegó al Celta en 2023 como uno de los jugadores más desequilibrantes de la Ligue 1 en un Lille que llegó a ser campeón de Francia, pero tras una primera temporada irregular, su primera vuelta con Giráldez fue bastante discreta y se marchó por la puerta de atrás. En enero llegó el Chicago Fire de la MLS y se lo llevó dejando al menos un dinero en caja.
Estos son algunos de los principales registros del Celta en la temporada 24-25:
-59 goles a favor, su segunda mejor marca en el siglo XXI (64 en la 01-02)
-6 remontadas, algo que nunca había logrado (el tope eran 4)
-10 goles de Iago Aspas por décima temporada en su carrera, algo que solo habían logrado antes 8 jugadores
-10 clasificaciones para competiciones europeas con esta
-0 partidos con empate a 0 en toda la temporada
-8 goles de penalti, una cifra a la que nunca había llegado en una campaña
-Sumó 2.002 partidos en Primera para convertirse en el décimo equipo que supera la barrera de los 2.000
-9 goles de Iago Aspas saliendo desde el banquillo para igualar a Juan Sánchez como el que más en el histórico del club
-40 goles de Iago Aspas de penalti en Primera, el sexto con más
-4 asistencias de Swedberg saliendo desde el banquillo, el que más dio así
-34 partidos distintos marcando (solo superado por Barcelona y Real Madrid), ya su nuevo techo en la historia
-14 goles de jugadores saliendo del banquillo, récord en una temporada celeste