Después de caer ante Köln y Stuttgart y empatar contra el Eintracht, el Borussia volvió a sumar los tres puntos en su visita al campo del Werder Bremen (1-2). Reus tuvo que dar la cara y salvó los muebles para el recién estrenado Edin Terzic.
Moukoko levantó cierta expectación al ser titular por primera vez, aunque no fue capaz de marcar y eso que tuvo ocasiones. Le dejó el protagonismo a su compañero, que fue el mejor de su equipo.
El primero en dar el golpe fue Guerreiro. En el 12', el lateral portugués aprovechó un rebote dentro del área y mandó el balón al fondo de la red con la zurda. 0-1 y algo de tranquilidad para los visitantes.
Pero en el minuto 28, los miedos volvieron a sobrevolar al Borussia. El Werder Bremen logró empatar gracias a Möhwald, que le pegó con la diestra desde la frontal y batió por poco a Burki.
A partir de ese momento, los porteros adquirieron su protagonismo con paradas de mérito. Y cuando todo está más que igualado, cualquier error te condena a la derrota.
En el 78', Pavlenka fue a despejar un balón, se le acabó escapando y se llevó por delante a Akanji. El árbitro indicó el punto fatídico y Reus tomó la responsabilidad.
El portero enmendó su error y sacó el balón a mano cambiada, pero el esférico cayó muerto casi en la línea y el atacante del Borussia solo tuvo que empujarlo. 1-2 y primera alegría sin Haaland.