El 3-0 de la ida hizo mucho daño a River Plate, que ahora sueña con remontar la eliminatoria ante el conjunto boliviano en El Monumental.
El presidente espera que sea una de las grandes noches en la historia del club: "Espero que tengamos la suerte que no tuvimos el jueves pasado. En Cochabamba, River jugó mal en las dos áreas. No pudimos meterla en jugadas muy fáciles de convertir. El hincha lo vio y por eso tiene optimismo. En lo más profundo está el convencimiento de que se puede. River va a tener diez posibilidades de gol seguramente, es cuestión de meter las que hay que meter", explicó D'Onofrio.
"Uno tiene que dominar el estrés que pueda producir el fútbol. Lo combate con la experiencia y está preparado", añadió el máximo dirigente riverplatense.