Andrew Robertson no vivió su mejor noche de Champions League, pero nada justifica la cobardía de unos ultras del Liverpool que se escondieron tras sus pantallas para amenazar de muerte al carrilero. Una vorágine de insultos que fue creciendo merced al paso de los días y ha desembocado en el cierre de su red social.
La acción de Robertson generó un sentimiento de repulsa hacia los energúmenos que le amenazaron y numerosas voces -ya no solo del mundo del fútbol- clamaron contra lo sucedido, para posicionarse al lado del futbolista.
En el minuto 82, Callejón encaró a Robertson y, al iniciar su diagonal, cayó en el interior del área en un lance con el lateral del conjunto 'red'. El árbitro señaló penalti, pero los aficionados del Liverpool no podían entender cómo el VAR no rectificaba la decisión del colegiado.
Si bien es cierto que en varias tomas se podría interpretar el penalti, en el club inglés consideran que el futbolista español cae antes de llegar al choque con el escocés, al que su propia hinchada acabó culpando de la derrota en San Paolo.