No estaba el Valencia en su mejor momento. Sumido en su enésima crisis institucional y goleado por el Barcelona, visitaba Londres para medirse al Chelsea. El Valencia le necesitaba, y él respondió.
Suyo fue el gol del triunfo en Stamford Bridge, el gol que ha dado, por fin, una buena noticia al Valencia. Llevaba meses sin marcar con el Valencia, rompió su sequía con la Selección, y repitió, con la elástica 'ché', en Champions.
Tardó en funcionar. Tardó en sacarse la espinita, pero cuando lo hizo, fue letal. El siguiente paso es mantener esta línea, por el bien del Valencia.