Mohamed Salah se llevó doble premio en Catar. El delantero del Liverpool se proclamó campeón del Mundial de Clubes y además fue elegido por la FIFA como el mejor jugador del torneo.
El equipo de Jürgen Klopp se llevó el título con un gol de Roberto Firmino en la prórroga, pero el papel del egipcio con la asistencia del triunfo ante Monterrey en semifinales y el trabajo en la final contra Flamengo le ha valido el 'Balón de Oro' que se otorgaba en Doha.
Además, tanto el 'Balón de Plata' como el 'Balón de Bronce' del Mundial de Clubes fueron a manos de futbolistas brasileños.
Bruno Henrique, de Flamengo, recibió el reconocimiento al segundo mejor jugador del torneo, mientras el tercero fue a manos del delantero del Al Hilal Carlos Eduardo.