Salomón Obama, aquel niño que arrasaba en los torneos de fútbol base con el Atlético de Madrid, se ha hecho mayor y se está labrando una carrera en el mundo del fútbol. Ahora, el internacional ecuatoguineano está de enhorabuena, ya que ha logrado el ascenso a la Primera División Chipriota con el Ethnikos Achnas.
El atacante, que militó en otros clubes españoles como Celta B, Mérida o Mótoles, concedió una entrevista a 'Marca' en la que trató varios temas vividos en su trayectoria. Entre ellos, su salida del cuadro 'colchonero': "Me puse muy triste y fui a hablar con mi familia. Y nada, decidimos salir al Celta, pero estuve llorando un buen rato con mi madre y con mi padre".
"Fue muy duro, pero ahora pensándolo bien fue algo bueno también, porque mira, no sabía que podía jugar en Primera División, es a lo que aspiraba siempre y ya he tenido la suerte de que al final puedo jugar en la categoría", añadió.
Además, Obama recordó la época en la que arrasaba en el fútbol base: "Yo creo más bien que era mucha presión a esas edades decir que si la promesa, el nuevo... decían muchas cosas pero claro, quisieras o no, aunque quisieras pasar de esas cosas era imposible. Era mucha presión a esas edades".
Por último, no dio avances sobre si su futuro seguirá en Chipre o no: "No sabría decirte, pero a mí me gustaría porque la verdad es que con mis compañeros estoy bien, el entrenador me ha dado mucha confianza y a mí me encantaría. Bruno tiene que hablar con ellos, así que estoy esperando lo que me diga. Yo espero que sí porque me ha dado mucha confianza y me quiere mucho".