"Después de pensarlo muchísimo con mi familia y mis agentes hoy me despido del club Atlético de Madrid, mi casa estos últimos 11 años", empezó diciendo Salomón Obama en su carta de despedida, publicada en las redes sociales.
Salomón justificó su decisión a continuación. "No han sido días fáciles, pero justamente con mi familia y mis agentes hemos creído que esta era la mejor opción para seguir progresando como futbolista", explicó.
"Quiero agradecer al club la oportunidad que me ha dado de crecer como jugador y sobre todo y más importante como persona. También por todo lo que me ha permitido vivir y disfrutar y sobretodo compartir momentos inolvidables con compañeros, entrenadores, fisioterapeutas, delegados, médicos, directivos ... muchos de ellos se han convertido en amigos y eso es lo que me llevo en el corazón", continuó.
"Igual que este club que allí donde vaya lo animaré como uno más. Gracias y gracias a toda la familia atlética por todo lo que me ha apoyado, me ha dado y a la que he intentado corresponder hasta el último segundo defendiendo con orgullo y pasión a este escudo. ¡Muchísimas gracias y aúpa Atleti!", esribió para finalizar.
9 de junio de 2019
Y a continuación anunció que se quedará en el Celta de Vigo, donde ha jugado la última media temporada. "Muy feliz de poder anunciar mi fichaje por el Celta. Con muchas ganas de vestir y defender esta camiseta y compartir muchas alegrías con esta afición", escribió, acompañando este mensaje con una fotografía con Iago Aspas, gran referente del club celeste.
9 de junio de 2019
Termina de este modo su vinculación al Atlético de Madrid. Salomón y Federico Obama obtuvieron un reconocimiento notable ya como alevines, por la superioridad física mostrada al enfrentarse a sus rivales a tan tierna edad.
Y aunque ascendió en la jerarquía del club a una velocidad vertiginosa, dejando en un segundo plano a su hermano Fede (fue un habitual en el Sub 19 en la Youth League y ha disputado 16 partidos con el primer filial), en enero decidió marcharse al Celta B en busca de minutos.
La competencia de Mollejo, Camello y Garcés fue demasiado para Salomón y optó por salir para tener más oportunidades, y en el Celta de Vigo parece haberlas encontrado.