El Genoa toma aire y suspira tras certificar en la última jornada su permanencia en la Serie A. Los de Davide Nicola 'solo' tenían que cumplir con su parte ante un dardo envenenado como el Hellas Verona, ya salvado pero combativo durante toda la temporada.
Sonríen por tanto en Génova, llora el Lecce que dio absolutamente todo de sí mismo para quedarse en la máxima categoría del fútbol italiano, pero el conjunto 'rossoblu' tiró de casta para apabullar al Hellas y golear por 3-0 en cuestión de 45 minutos.
Tony Sanabria abrió el marcador al cuarto de hora de partido. Un centro por la derecha de Lerager encontró la cabeza del paraguayo, completamente solo entre los centrales para empujar el esférico dentro de la portería de Radunovic.
Y apenas 12 minutos después, el delantero puso muy de cara el asunto con un doblete exprés, esta vez asistido por el eterno macedonio Goran Pandev. A sus 37 años, el ex de Lazio, Inter o Nápoles despide otra campaña en la élite con nueve goles en su cuenta.
El tercer tanto genovés llegó al borde del descanso, obra de Cristian Romero. El central argentino hizo su primer tanto de la temporada en el mejor momento con un cabezazo inapelable en el segundo palo.
Curiosamente, la expulsión del propio Romero por doble amarilla fue la única anédota en una segunda parte donde el Genoa se limitó a digerir su salvación. Sofian Amrabat y Cassata se irían también con roja por un enganchón en un añadido bronco y sin más.