El Bayern arrasó al Schalke 04 en casa en la primera jornada de la Bundesliga y su buena actuación pasó por un Gnabry infalible. El atacante firmó un 'hat trick' gracias a un pase de Sané que más que un pase fue un regalo. La tuvo para marcar y decidió regalarle la bola.
Había recibido justo un pase en profundidad por alto que le había dejado solo ante Fährmann. Se acercó Kabak para presionarle, así que giró sobre sí mismo para encontrar el hueco y pasársela a Serge en lo que el guardameta se acercaba a la carrera.
Ello propició que le pillara a contrapié y Gnabry pudiera mandar la bola al fondo de las mallas con toda la ventaja del mundo. Algún que otro defensa se colocó bajo palos para intentar evitar la catástrofe, pero era demasiado tarde y la 'manita' era una realidad.
Hay que ponerle mucho ojo a este jugador. Ya estuvo soberbio en la fase final de la Champions League y, recién empezada la Bundesliga, parece preparado a colocarse en la zona alta de la lista de los mejores futbolistas no solo de Alemania, sino del mundo.