Semedo se coló en el área como Nelson por su casa cuando se cumplía el primer cuarto de hora de juego.
Cogió la moto en la banda y no encontró freno alguno a su paso. Pisó área y encaró a Moris, aunque el portero visitante, con ayuda de un defensa, logró abortar el peligro.
Sin embargo, la bola cayó en los pies de Bernardo Silva, que se encontraba sin marca en el área. Pese a la presencia de dos rivales bajo palos, el luso mandó la bola al fondo de la red con la zurda.
Portugal había avisado anteriormente por dos veces al meta luxemburgués. Joao Félix tuvo dos ocasiones que no supo convertir en gol, aunque especialmente clara fue la segunda, en la que mandó el balón fuera con un remate desde dentro del área.