Minuto 31 del Barcelona-Atlético de Madrid. Sergio Busquets no puede seguir jugando y Ronald Koeman decide dar entrada en su lugar a Ilaix Moriba.
En el banquillo azulgrana también están Riqui Puig, Miralem Pjanic y Sergi Roberto, pero el técnico neerlandés se decanta por el mediocentro de tan solo 18 años para que juegue prácticamente todo el encuentro ante un rival rojiblanco con el que el Barça se está jugando el título de Liga.
Y sobre el césped Ilaix se coloca entre De Jong y Pedri como eje del centro del campo 'culé', una columna vertebral en uno de los partidos más importantes del Barcelona de toda la temporada con una media de edad de tan solo 19,6 años.
Los mismos 18 años de Ilaix los tiene también Pedri, mientras que De Jong suma 23. Una nueva generación que ya adelanta a los habituales sobre el terreno de juego, un nuevo Barcelona en el que Koeman confía, como bien ha demostrado.
Pese a que se esperaba como uno de los mejores refuerzos del club, la ralidad es que Pjanic no ha cuajado en el Camp Nou. El mediocentro de 31 años no está rindiendo al nivel esperado en su primer curso como azulgrana.
Tras poner punto y final a sus cuatro años con la Juventus, equipo con el que llegó a jugar 179 partidos, el internacional bosnio llegó a un Barça que apostó al máximo por él, pero sus números son más bien escasos: 28 partidos, 13 como titular, ningún gol y ninguna asistencia.
Y tal vez por eso Koeman decidió apostar por Ilaix, quién sabe. Lo cierto es que el canterano azulgrana apenas ha jugado 16 partidos con el primero equipo, tres de ellos como titular, aunque ha encontrado portería en una ocasión y ha regalado un par de asistencias de gol.