Las aguas están revueltas en el Camp Nou. El Barça, que tenía la victoria en el bolsillo ante el Celta, dejó escapar dos puntos vitales en la lucha por LaLiga.
El Madrid tiene en su mano meterle dos puntos (tres con el 'gol average') y eso ha llevado a que los jugadores empiecen a dudar de Setién.
No hay más que ver el 'recadito' de Suárez al cántabro tras acabar el partido: "¿Que qué nos pasa? Para algo están los entrenadores, para analizar las situaciones".
Un mensaje que a buen seguro habrá tomado nota el técnico. Y es que el uruguayo, que firmó un doblete, estaba bastante molesto porque vio que tras su salida, el Celta acabó empatando.
Asimismo, el charrúa también se mostró enfadado por la mala racha a domicilio del equipo. El cuadro azulgrana apenas ha sumado 23 puntos de 48 posibles (con dos entrenadores) jugando como visitante, un dato bastante demoledor.
Después de todo el lío con Arthur, Setién se encuentra con un problema dentro del vestuario que deberá resolver para afrontar la pelea final por el campeonato.
De no recuperar la confianza de la plantilla, su permanencia en el Barça de cara a la próxima temporada se complica. El cántabro, con contrato hasta 2022, tiene trabajo por delante.