Hace apenas dos meses, solo Leo Messi parecía destinado a levantar el próximo Balón de Oro, que sería el sexto de su carrera deportiva si finalmente termina lográndolo. Su temporada a nivel personal fue fastuosa: Bota de Oro, 51 goles, 19 asistencias, una Liga y 'Pichichi' de la Champions. Casi nada, ¿verdad? Pues a día de hoy no es el gran favorito para ganar el Balón de Oro.
Al menos para las casas de apuestas, que señalan ahora a Van Dijk como el gran aspirante a suceder a Luka Modric. El neerlandés tampoco se queda atrás en sus méritos, ya que conquistó con el Liverpool la Champions (siendo elegido el mejor jugador de la final), terminó subcampeón de la Premier más competida que se recuerda y se llevó el premio a mejor futbolista de la Liga Inglesa.
"Creo que Messi es el mejor del mundo, merecerá el Balón de Oro mientras juegue. No importa si no llegó a la final este año. No pienso en ganarlo, pero si me lo dan, lo tomaré", señaló Van Dijk nada más conquistar la Champions en el Wanda Metropolitano. El 'red' parece que es el único que puede discutir a Messi, toda vez que Cristiano no cumplimentó una temporada estelar.
Aunque el propio jugador portugués sacó pecho por lo conseguido en su primera campaña en la Juventus, con la que conquistó la Serie A. Sin embargo, no fue el máximo goleador de la competición ni tuvo peso en la Champions, donde la Juve cayó de forma prematura a manos del Ajax. Con Portugal, eso sí, conquistó recientemente la primera edición de la Liga de Naciones.
En esta carrera, a Messi puede penalizarle su horrible 'sprint' final. Llegó a Anfield con la final de Champions en el bolsillo, pero fue borrado del mapa sin que pudiera hacer nada por evitarlo. Después llegó otro varapalo en la final de la Copa del Rey, que fue a parar a manos del Valencia. Por último, una Copa América en la que ha sido intrascendente para la 'Albiceleste'.
Solo un gol, y de penalti, convirtió el astro del Fútbol Club Barcelona. En semifinales hincó rodilla ante Brasil, aunque el encuentro tuvo tintes polémicos. Como lo tuvo el partido por el tercer puesto, en el que el '10' terminó expulsado y bramando de forma pública contra la CONMEBOL. Sigue siendo favorito, faltaría más, pero a Messi se le ha podido escapar la opción de amarrar definitivamente el Balón de Oro.