Vaya por delante un hecho: tanto el gol de Kylian Mbappé en el España-Francia como el de Roberto Firmino en el Watford-Liverpool subieron al marcador de forma correcta. Muchas veces, olvidamos que detrás del colegiado y de sus asistentes (VAR incluido) hay años y años de trabajo y de estudio del reglamento, por lo que acciones como las reseñadas se conocen, se trabajan y se analizan. Un análisis que vaya más allá entraría en el terreno de la opinión, y de eso no vamos a hablar aquí.
Dicho eso, nos metemos de lleno en la jugada que nos concierne: el Liverpool vencía cómodamente al Watford por 0-3. En el minuto 52, un centro raso de Robertson llegó a Roberto Firmino tras un corte previo de un defensor local. El delantero brasileño no se lo pensó e hizo el 0-4.
En dicha acción, el zaguero en cuestión, Craig Cathcart, corta un esférico que llegaba a Salah en posición franca para fusilar a Foster. Sin embargo, el atacante egipcio se encontraba en claro fuera de juego cuando el balón salió de los pies de su compañero.
Pese a que es cierto que el balón acaba llegando a otro jugador diferente a Salah, la acción no se anula por eso, sino porque se interpreta que el ex de Chelsea o Roma se encuentra a una distancia suficiente de su rival como para considerar que no influye en su toma de decisión. Exactamente lo mismo que se interpretó en el gol de Mbappé ante Francia, algo recogido en las Reglas del Juego.
Esta norma se cambió precisamente hace ya unos años porque se consideraba que beneficiaba en exceso al defensor, que podía ejecutar un despeje defectuoso y no tener consecuencias por ello si un contrario cogía el balón en posición antirreglamentaria. Faltará por ver si, con la repercusión que tuvo el tanto de la Liga de las Naciones el IFAB vuelve a darle una nueva vuelta de tuerca a ese apartado.
October 16, 2021