Se trata de un duelo de rivalidad que estará marcado por los 20 puntos de diferencia que hay en la tabla entre ambos contendientes.
Por lo que respecta al filial del Villarreal, el equipo llega al choque tras la derrota sufrida ante el Hércules que truncó una racha de cuatro victorias consecutivas, aunque el equipo pudo mantener el liderato.
El equipo de Miguel Álvarez es consciente de que no puede dejar escapar puntos en casa, tanto por clasificación como por lo que supone el derbi y, en especial, por afrontarlo como local.
El equipo llega con la baja de Manu Morlanes, que sigue lesionado y que sin duda es una de las ausencias de más peso, a lo que se une la salida de Pedrito, que ha fichado por el Logroñés en este mercado invernal.
Esas bajas se compensan con la llegada de dos ex jugadores del filial y de la cantera, que regresan al que fue su equipo. Víctor Moya "Chuca" y Migue Leal regresan del Elche y Murcia tras dos cesiones fallidas.
La alineación estará integrada por Joan Femenías, Andrei, Roger Riera, Carlos Blanco, Quintillà, Ramón Bueno, Iván Martín, Simón, Riera, Mario González, Rubén Mesa.