El Nápoles dijo adiós a muchas de sus opciones de conquistar el Scudetto tras empatar ante el Milan en un partido marcado, una vez más, por la falta de gol del conjunto napolitano, que ha perdido la puntería en estos últimos meses.
El foco de esa falta de gol está puesto en Mertens, que no se ha mostrado certero de cara a puerta como a principios de temporada. El belga fue un estilete de emergencia que rompió a meter goles el año pasado (34 tantos) tras la lesión de Milik.
Apenas dos goles en el último mes y medio han dejado al Nápoles sin la pegada necesaria para mantener la presión de una Juventus que ha vuelto a cumplir con el guión y a adelantarle por la derecha.
Tras lo de este fin de semana, el Scudetto lo tienen prácticamente en la mano, aún con la baza de ese duelo directo con los napolitanos en Turín. Sin Mertens, ni Insigne ni Callejón han tomado el relevo goleador y el Nápoles se ha quedado a las puertas de otro histórico título.