El sistema de cesiones del fútbol funciona perfectamente. Los equipos con mayor poderío económico se hacen con las perlas de ligas que orbitan alrededor de las de mayor enjundia de Europa y gestionan sus derechos deportivos con la promesa de contar con ellos, algún día, en sus primeros planteles. Otras entidades se benefician de recibir a estos chicos teniendo que asumir tan solo su sueldo o parte de su sueldo, lo que siempre implica una chispa de talento para sus vestuarios y de esperanza para sus aficionados.
El sistema de cesiones del fútbol está roto. Las perlas de ligas que orbitan alrededor de las de mayor enjundia de Europa se ven en equipos de mayor poderío económico que gestionan sus derechos deportivos con la promesa de verse, algún día, en sus primeros planteles. Otras entidades se aprovechan y les reciben en contrapestación con asumir tan solo su sueldo o parte de su sueldo, lo que siempre implica una chispa de exigencia para sus precoces carreras y de sensación de fracaso si no sale bien.
¿Pueden convivir estas dos realidades? ¿Qué pasa con el sistema de préstamos del deporte rey? Este miércoles por la noche, el Dundee recibe al Rangers en la jornada 10 de la Liga Escocesa. En el conjunto visitante, milita un chico de tan solo 21 años que ya va por el tercer paso temporal de su carrera. Se trata de Fábio Silva, que se mueve bajo el ala del superagente Jorge Mendes, quien logró que el Oporto le vendiera a los Wolves, en 2020, por 40 millones de euros, el cuádruple de su cláusula de rescisión.
¿Cómo lo logró? No lo sabe ni el presidente de los 'dragones'. En octubre del año en el que se despidió de su perla, en una entrevista con 'TVI', elogió al representante por el "buen negocio" que había llevado a cabo. "Mendes le vino bien al Oporto. Fábio Silva tenía una cláusula de 10 millones de euros y salió por 40. El Oporto ganó 20 millones, ya que recibió 30 en vez de 10. Varias agencias estuvieron involucradas y el 25% se fue en comisiones", explicó.
Aquí es donde empieza el lío. ¿Adónde fue a parar ese 25% en comisiones? Se supo en verano de 2021, cuando el diario portugués 'Correio da Manha' se hizo eco de que tanto GestiFute, la compañía de Mendes, como STV, una empresa en propiedad del padre de Fábio Silva, habían percibido 7 y 3 millones de euros, respectivamente. El resto, los 30, debió figurar en las cuentas de Do Dragao, pero no lo hizo. El club tan solo registró un ingreso de 25 'kilos'.
December 28, 2023
¿Qué pasó con los 5 restantes? La Justicia lo ha investigado en varias ocasiones en el marco de un operativo llamado 'Operación Tarjeta Roja'. El asunto es que, aunque se ha relatado, en varios medios de comunicación, el inicio o la continuación de estas pesquisas, nunca se ha llegado a una conclusión. Lo único confirmado es que todos los partícipes se vieron beneficiados menos el propio jugador, que tenía 18 años entonces.
En su primera temporada en la Premier League, salió al campo en 36 ocasiones, 15 de ellas como titular. En la siguiente, lo hizo en 26, 10 de ellas de inicio. Los despachos del Molineux Stadium entendieron que lo mejor era cederle al Anderlecht, donde destacó con 11 goles en 32 actuaciones, 28 de ellas en los onces de comienzo, pero, a su regreso, tampoco gozó de un espacio firme y salió al PSV, donde redujo sus prestaciones a la mitad tanto en minutaje como en efectividad de cara a la meta.
La actual campaña la comenzó, de nuevo, en Inglaterra, donde se quedó sin oportunidades conforme el curso se acercó a su ecuador. Es por eso que, desde hace algo más de cuatro meses, milita en el Rangers, donde parece que se ha hecho con un hueco indiscutible en el equipo. El problema es que, por su estancia en la Liga Belga, es consciente de que esto no quiere decir nada respecto a su futuro con los 'lobos'.
El propio futbolista se ha mostrado arrepentido en algún diálogo rememorando el momento en que firmó su contrato con los Wolves, que se extiende hasta 2026. No estaba preparado para un reto tan grande, pero nadie de su entorno le aconsejó que dejara pasar un tiempo o que se decantara por una opción distinta. Había 40 millones de motivos para sonreírle y decirle que sí, que estaba tomando la decisión correcta.
De hecho, cuando aún vestía la camiseta del Oporto, el propio club llegó a oficializar su renovación con una cláusula de 25 'kilos' que, al final, resultaron ser 10 y que algunos periódicos lusos cifraron en 125 por un mecanismo legal. ¿Y si se jugó con su talento para sacar un beneficio que ha satisfecho a todos menos a él? ¿Y si su precio no dependió del mercado, sino de la conveniencia? No hay respuestas negras o blancas, solo grises. El color favorito del sistema de cesiones del fútbol.
March 26, 2024