Gustavo Alfaro sigue trabajando en una plantilla que contará con cambios en los próximos días. Se espera que todavía haya algún que otro movimiento tanto en el apartado de salidas como de llegadas.
Las ventas de Magallán (Ajax) y Balerdi (Borussia) han hecho ver al técnico de Boca que es necesario cerrar un defensa. Y todo ello para evitar que esa zona esté bastante mermada en este semestre de competición.
El primero de los nombres que hay encima de la mesa es Palomino, que milita en el Atalanta. A pesar de los intentos del jugador en abandonar el equipo, el conjunto italiano se niega a traspasarlo.
Otro de los futbolistas a tener en cuenta es Víctor Cuesta. El zaguero de Internacional de Porto Alegre, titular indiscutible, es una opción complicada porque el cuadro brasileño pide su cláusula y está tasada en más de 50 millones.
En cuanto a Walter Kannemann, el jugador de Gremio cierra el círculo. A Burdisso le gusta, pero no depende de él. El problema que hay es que el 'Inmortal Tricolor' pide poco más de 17 millones.