Los enfrentamientos entre PSG y Marsella representan mucho más que un partido de fútbol. Es un duelo que, históricamente, ha sido el espejo de la lucha de clases. El norte contra el sur. La pelea contra la capital.
Sin embargo, 'Le Classique' de este año vendrá más caliente de lo habitual por las diferentes circunstancias que atraviesan tanto el país en sí como el propio PSG.
Y es que el cuadro de Thomas Tuchel vive unos momentos muy delicados después de su dolorosa y sorprendente eliminación en los octavos de final de la Champions ante el United.
La inesperada derrota no sentó nada bien a los radicales del club parisino, que han decidido protestar contra el rendimiento del equipo capitalino.
De hecho, como recoge 'AS', los ultras del PSG no se sentarán en sus sitios habituales del Parque de los Príncipes, generando una preocupación añadida a unas Fuerzas de Seguridad desbordadas.
Y es que a este malestar de los aficionados más violentos del cuadro de París se suma el difícil clíma político y social de la capital, focalizado en los famosos 'Chalecos Amarillos'.
Las protestas e incidentes generados en sus manifestaciones ya han obligado a aplazar varios duelos del PSG este curso. Una situación que pondrá en alerta máxima a la Ciudad de la Luz.