Cristhian Stuani monipoliza el ataque del Girona, para lo bueno y para lo malo. Para lo bueno, por ser el autor del tanto con el que el cuadro gerundense ganó al Alcorcón. Para lo malo, por fallar hasta dos penaltis en la segunda mitad.
Quiso acercarse el delantero al dudoso honor que mantiene Palermo de más lanzamientos de once metros errados en un partido. Finalmente se quedó en dos, uno de 'Panenka' y otro por lanzarlo demasiado fuerte.
Antes de ello, el Girona ya mandaba en el partido y en el marcador. En el césped, por el férreo control que tenía ante un Alcorcón que ni siquiera descendido pudo dar una alegría a Santo Domingo.
El propio Stuani fue el encargado de marcar el único tanto del partido. En una especialidad suya como es el remate de cabeza, el ariete aprovechó la prolongación de Juanpe para batir al joven Jesús Ruiz.
Lo intentó el Alcorcón en la segunda mitad, pero el conjunto 'alfarero' volvíó a cuajar un partido flojo, como ha pasado a lo largo de la temporada que le ha condenado a la Primera RFEF.
Las peores noticias para el conjunto madrileño llegaron en la lesión de Víctor García, quien se dobló el tobillo en el gol de Stuani y abandonó el campo sin poder apoyar la articulación.
Finalmente, el Girona se hizo con tres puntos clave para amarrar su posición de 'play off' y, de paso, meterle más presión al Tenerife y al Oviedo.