Los octavos de final de la Copa Argentina van tomando color, pero la ronda anterior estuvo a punto de no terminar de disputarse en el cara a cara entre Talleres de Córdoba y Colón. La cita terminó con 1-0 para los locales con un gol de Girotti en el tiempo de descuento de la primera parte, al rato de que el árbitro tuviera que detener el evento debido al mal comportamiento de los aficionados en las gradas.
El colegiado hasta se acercó a la banda para hablar con los entrenadores en fin de encontrar una solución. Al final, se consensuó que las autoridades advirtieran a los espectadores de que debían dejar de subirse a las vallas que delimitan los asientos del verde y de que está prohibido lanzar petardos al césped, donde pueden ser un problema grave para los jugadores, principalmente para los porteros, que son quienes más cerca están de las tribunas.
La polémica no terminó ahí, pues se trasladó al tapete en los compases finales, cuando los visitantes ya eran conscientes de que el tiempo se acababa para forzar las tablas al menos y tanto Toledo como Bernardi fueron expulsados. El primero, después de un choque con un atacante en la defensa de un centro, se levantó, se encaró con un segundo contrincante que fue a pedirle explicaciones y, con la mano puesta en su rostro, le empujó.
Poco después, su compañero tuvo que enfilar el túnel de vestuarios de la misma manera por su forma de dirigirse al árbitro. Para Colón, no supuso demasiado a nivel deportivo porque el partido ya estaba perdido, pero las cartulinas reforzaron la sensación de impotencia que invadió a sus aficionados desplazados. Ya solo quedan, para conocer al resto de opositores a los octavos de final, el Platense-Huracán, el Boca Juniors-Almirante Brown, el Estudiantes La Plata-Central Córdoba y el Rosario Central-Barracas.
June 7, 2024