El Liverpool empezó por detrás en el marcador debido al gol de Townsend, que se atrevió a perforar la portería de Alisson cuando se cumplió la primera media hora del partido.
Pero en la segunda parte se le vio otra cara al equipo 'red', que aprovechó toda ocasión. La primera tuvo como protagonista a Salah, que aprovechó un balón a la espalda de la defensa.
El egipcio se quedó completamente solo y levantó la pierna para tocar el balón con la punta de la bota, casi despistando al arquero y colocándolo por el palo corto.
Salah, recurso de calidad para empatar el partido. #PremierMLC pic.twitter.com/n3Vpry4Qu5
— La Casa del Fútbol en Movistar+ (@casadelfutbol) 19 de enero de 2019
Muy poco después, Firmino hizo el tanto de la remontada, significando el gol número 1.000 en la Premier en Anfield. Pero la suerte de Salah continuó en Anfield y gracias a ello llegó el tercero de los 'reds'.
El delantero sacó petróleo de un regalo de Speroni, que en vez de despejar el balón con la mano lo puso en la bota de Salah. El arquero despejó hacia adentro y Salah solo tuvo que poner el pie.
Por favor. Que gol. pic.twitter.com/dwO0yQhMr6
— Angel Diaz Perez (@ANGELDIAZ14) 19 de enero de 2019