Ahora en el Stoke City, al que volvió tras un frustrante paso por el Alavés, el delantero catalán intenta recuperar el fútbol que siempre tuvo en sus botas y que le hizo batir récords de precocidad de azulgrana.
"Recuerdo el primer día: estaba sentado a cinco metros de la esquina donde estaban las botellas de agua. Tenía sed... pero nunca me levanté para ir a buscar una botella. Tenía miedo de hacer el mal", cuenta Bojan sobre su primera convivencia con las estrellas del Barcelona.
Aun así, recuerda aquello con cariño. "El Bojan de esa edad era jugador de fútbol 100%. Pero no estaba preparado para soportar el impacto mediático que afecta a un joven de 17 años que juega en un club como el Barça. Fue un gran impacto. Me encontré en el vestuario junto a Eto'o, con Puyol no muy lejos, Iniesta... De todos modos, cada día era un sueño", comentó.
Una crisis de ansiedad le apartó de la Selección. Se desmayaba con frecuencia y tomaba pastillas. Todo ello producto de la presión. "Ahí es donde empezó todo. Comencé a estar ansioso. Tuve que parar. Tuve que hacer un tratamiento y un seguimiento psicológico", señaló.
Salió del Barcelona tras no convencer a Guardiola. "Con él fue difícil. Por primera vez ya no era una estrella. Empecé a ver el otro lado del fútbol", afirmó Bojan.