El tiempo le va dando la razón a Thibaut Courtois. Pese a que su llegada al Real Madrid estuvo cargada de controversia por la competencia con Keylor Navas, el belga se ha afianzado bajo los tres palos durante los tres últimos años.
En el último choque, el meta evitó en contadas ocasiones el gol del Inter de Milán en el cruce de Champions League. Sus paradas ante los disparos de Lautaro y Dzeko hicieron que varios miembros del cuadro rival elogiaran su labor tras el partido.
Al igual que ocurrió ante el Real Betis en el Benito Villamarín, el portero mantuvo la portería a cero para que los 'merengues' consiguieran una victoria por la mínima (0-1).
El buen momento del belga se remonta al año 2020. Courtois fue decisivo en la recta final de la temporada 2019-20, que acabó con la trigésimo cuarta Liga en las vitrinas del Bernabéu. Además, fue el primer madridista en conseguir el Trofeo Zamora tras Casillas.
Por otro lado, desde la llegada del belga, el Real Madrid logró cerrar las dos últimas ligas con menos de 30 tantos encajados, algo que no conseguía desde la campaña 1994-95. Con estas cifras, se entiende que sean casi inexistentes los aficionados que cuestionen la titularidad y la importancia de Thibaut al frente en el cuadro blanco.