El Rennes tiene una joya aún por pulir que podría volar en el próximo verano. Eduardo Camavinga, a sus 17 años, lidera al tercer clasificado de la Ligue 1 y es objeto de deseo de grandes clubes.
Tanto el Real Madrid como el Barcelona tienen el nombre del jugador angoleño apuntado en su agenda. El conjunto blanco le sigue desde hace meses, pero la intromisión del cuadro azulgrana puede encarecer la operación.
Informó 'Sport' que el Barcelona, en la búsqueda de un centrocampista todoterreno, se ha fijado en el futbolista del Rennes. La secretaría técnica liderada por Abidal ha seguido a varios jugadores en los últimos meses, pero se ha quedado con el angoleño.
La intención del Barcelona, según la fuente citada, es la de incorporar a un jugador que pueda actuar tanto de '6' como de '8'. Se da por supuesta la salida de Ivan Rakitic y Arturo Vidal podría seguir el mismo camino.
Por ello, y con Frenkie de Jong, Arthur Melo y Sergio Busquets en la medular, el cuadro de Setién busca a un diamante en bruto que pulir y por el que no pagar más de 100 millones de euros.
Eso sí, el Barcelona tendrá un duro competidor en el Real Madrid. El conjunto blanco ya negoció incluso con el Rennes su venta, lo que provocó la destitución del presidente del conjunto galo por hacerlo a espaldas de la junta de accionistas.
El Real Madrid lleva meses suspirando por la próxima gran perla del fútbol francés. El hecho de tener a una leyenda gala como Zidane en el banquillo incluso acerca a Camavinga a la capital de España.
Con la suspensión de los campeonatos debido al COVID-19, los despachos ganan protagonismo durante estas semanas. Y uno de los jugadores llamados a cambia de equipo es, precisamente, Eduardo Camavinga.