La tragedia y la vergüenza apareció en Indonesia en un partido de fútbol. Un encuentro que enfrentó al Arema FC y al Persebaya Surayaba acabó con al menos 174 muertos y más de 180 personas heridas por los disturbios, según informes policiales.
Dicha cifra, explicaron posteriormente las autoridades indonesias, se rebajó hasta 125 personas, debido a que, según 'AP', se contaron algunas víctimas por partida doble.
Una cifra que resulta casi imposible e impensable, pero que es real. Y es que tras el pitido final, las dos aficiones invadieron el terreno de juego para comenzar los altercados y sembrar el miedo por todo el campo de juego.
Todo comenzó cuando los hinchas del Arema FC entraron al terreno de juego tras la derrota de su equipo 3-2 ante el Persebaya Surayaba, en el estadio Kanjuruhan. La policía intentó reprimir la invasión de campo con botes de humo.
Fruto del miedo, numerosos aficionados comenzaron a correr produciéndose una montonera que desembocó en masacre. Muchos de los fallecidos quedaron atrapados sin poder moverse y murieron asfixiados o pisoteados.
"La gran familia de Persebaya expresa su más sentido pésame por la pérdida de vidas tras el partido Arema FC vs. Persebaya. Ninguna vida vale fútbol. Alfatihah por las víctimas. Y que la familia dejada atrás tenga fortaleza", expresó la cuenta del equipo en Twitter.
October 1, 2022
La Liga de Indonesia suspendió todos los partidos del fin de semana y ya se informó que el Arema no volverá a jugar con público en lo que resta del campeonato. Por su parte, la Asociación de Fútbol de Indonesia también emitió un comunicado de condolencia para los familiares de las víctimas.
"Nuestro más sentido pésame por el incidente que les sucedió en el Estadio Kanjuruhan, Malang. Que los difuntos y encuentren el mejor lugar y la familia doliente pueda recibir fortaleza", escribió.
October 2, 2022
La Federación de Indonesia ha informado que investigará los hechos y, además, parará el fútbol. "Detendremos la competición de la Liga 2022-23 durante una semana", escribió en un comunicado.
Y habrá castigo para el Arema por la reacción de sus hinchas que terminó provocando una tragedia histórica. "El equipo tiene prohibido ser anfitrión por el resto de la temporada durante la competición", cerró la Federación.
Tres son las causas que, según 'AS', estarían barajando las autoridades indonesias sobre lo ocurrido. La primera, que la actuación de la policía, hecho del que más se está hablando, haya provocado los disturbios. La segunda, que hubiera un exceso de aforo: el estadio tenía capacidad para 38.000 y parece que habría unas 42.000 personas. Y tercera, deficiencias en la seguridad que hicieron que se retrasara la llegada de las asistencias médicas.
El mundo del fútbol está de luto. Muchos son los jugadores, clubes y competiciones del mundo que han dado las condolencias a las familias y amigos de las víctimas. En España, en los partidos de Primera y Segunda se guardará un minuto de silencio en recuerdo de los fallecidos.
Los jugadores que vivieron el partido todavía no dan crédito. Abel Camará, del Arema, describió el horror vivido a 'Mais Futebol'. "Teníamos personas dentro del vestuario que sufrieron el gas lacrimógeno y murieron frente a nosotros. Tuvimos siete u ocho fallecidos en el vestuario", relató.