Las recientes declaraciones del director deportivo del Celta, Felipe Miñambres, confirmaron el interés del club en renovar al mediocentro serbio, cuyo actual contrato se extiende hasta 2022.
"Ya antes de lo del Inter hablamos con sus agentes porque pensábamos que su rendimiento debía ser recompensado y les informamos que nuestra intención era cuadrar su salario con la valía del jugador", aseguró el responsable en una rueda de prensa.
Y es que no cabe duda de que Lobotka se ha convertido en una pieza fundamental en el esquema de Unzué desde su llegada el pasado verano. Tanto que la directiva dejó claro que sólo dejaría marchar al jugador por una cantidad no inferior a los 35 millones de euros.
De esta manera, deshizo en un santiamén las intenciones de uno de los grandes de Italia, el Inter de Milán, que pretendía llevárselo en el pasado mercado. A esta operación se refirió también Miñambres.
"El Inter de Milán estaba muy interesado, pero nosotros nos remitimos a la cláusula. Nos propuso una cesión con opción de compra obligatoria a final de temporada", explicó.