Óscar Trejo dejó de ser capitán del Rayo Vallecano esta temporada. El argentino renunció. Sus motivos son las diferencias que tiene con el trato que reciben, de parte del presidente Raúl Martín Presa, los trabajadores y aficionados de la entidad. Y por ello fue cuestionado en 'Jet Down'.
El jugador matizó que, aunque sea una responsabilidad, no rechazó el brazalete por ser una carga: "Obviamente, no es bueno tener ese desgaste. Pero yo no lo he hecho solo por el desgaste. Antes me preguntabas por qué creo que la gente me tiene ese cariño: porque tengo unos principios y unos valores".
"A mí, lo que está haciendo el presidente con los trabajadores no me parece bien. Te lo digo a ti y me quedo tranquilo porque la primera persona a la que se lo he dicho ha sido a él, a Cobeño, y a partir de ahí ha sido tomar la decisión", amplió.
Trejo dejó claro que no tiene contacto con Martín Presa, con el que ni se saluda: "Ahora no tengo relación. A partir de eso ni siquiera nos decimos "hola". Él me ve, agacha la cabeza, nos cruzamos y no nos decimos nada".
Por último fue cuestionado sobre la contratación de Carlos Santiso para el banquillo del equipo femenino, un entrenador al que rodeó la polémica tras filtrarse un audio en el que animaba a su cuerpo técnico a realizar una violación recordando el 'caso Arandina'.
"Miles de veces hemos preguntado y nunca han sabido responder. Es como: "Vamos a darle una oportunidad". ¿Oportunidad de qué? ¿Con lo que ha pasado? Yo le ponía el ejemplo de mi hija: 'Si pasa eso y está, yo saco a mi hija. Mi hija no estaría jugando en el Rayo'. Gracias a Dios mi hija tiene 11 años y no está ahí, pero la verdad es que son decisiones que no pegan", concluyó.