Si algo estuvo este derbi granadino, que terminó con victoria del filial nazarí por 0-1, fue pasado por agua, pues ningún operario del club motrileño pudo frenar el funcionamiento de estos aspersores.
Uno escucha oír aspersores encendidos y puede que se acuerde del momento en el que se encendieron los del Camp Nou para tratar de apagar la celebración de Mourinho y el Inter, su verdugo en Champions hace años.
Sin embargo, este caso es único. Un equipo de Segunda B, el Recreativo Granada, y otro de Tercera, el Motril, disputando un choque con el riego encendido. Sin duda, pocas cosas nos quedan por ver ya...
19 de julio de 2019