Sin ir más lejos, el Newcastle llegaba tras caer eliminado de la segunda ronda de la Capital One Cup por el Leicester City. Anteriormente encadenó las dos primeras jornadas ligueras con derrotas.
Sin embargo, la jornada 3 dio un respiro a los pupilos de Steve Bruce, y vaya bocanada de aire fresco, con una victoria en Londres sobre el Tottenham (0-1).
Las sensaciones en el Watford eran peores. Tras tres derrotas en la Premier, consiguió eliminar al Conventry en un partido que significó un plus de vida para Javi Gracia en el banquillo.
El partido comenzó del lado visitante. De hecho, Hughes adelantó al Watford al aprovechar una acción de contragolpe veloz y una asistencia magnífica de Cleverly.
No pudo aguantar la ventaja el Watford, que se deshizo en defensa, como viene siendo habitual, y permitió que Schär recibiera en el área para marcar a placer. Todo ello, al filo del descanso.
Un gol que hizo daño, pero la segunda parte no desequilibraría. El Newcastle cogió las riendas. Kabasele llegó a tiempo en varias ocasiones para blocar y el empate acampaba en el electrónico.
El Watford buscó la sorpresa mediante la velocidad de Success y Chalobah. Finalmente, el 1-1 no se movería y dejaba un punto insuficiente pero que permite a avanzar a ambos equipos.