Sin nada por lo que luchar más que la dignidad, el partido entre Levante y Atlético Madrid atraerá más la atención de las emociones que de la tensión.
Será un partido de despedidas. Será el momento de decir adiós a varios jugadores, algunos se quedarán en LaLiga y otros se marcharán, pero todos ellos dejan un legado.
Empezando por el capitán levantinista Pedro López, que tras ocho temporadas en el Ciutat de València se despide de unos colores que hace tiempo tiñeron también su corazón. Pero, sobre todo, por el nivel mediático de sus dorsales, será el último encuentro de varios jugadores del conjunto 'colchonero' a las órdenes del Cholo.
Sin Morata ni Saúl, sancionados, Griezmann se vestirá de rojiblanco por última vez acompañado por Correa. Queda por descubrir como le recibirá la afición atlética desplazada a la capital del Turia.
Será el último encuentro de uno de los mejores centrales que ha visto la Primera División. El resignado hasta luego de Diego Godín, quien entre Villarreal y Atlético de Madrid acumula 12 temporadas en la élite española, nueve entre el Calderón y el Wanda.
Pero también es el último encuentro de Filipe Luis y Juanfran, dos jugadores que contribuyeron positivamente a armar la metodología 'cholista' que tantos éxitos dio al club, así como a representar unos valores fielmente ligados al deporte. Respeto, solidaridad, trabajo en equipo... vuelan los adjetivos.
El feudo levantinista será partícipe de algo más que un partido de fútbol. El Levante-Atlético de Madrid se antoja como la más fiel representación del fútbol desde una perspectiva social. El fútbol también es de aquel que se va, para quedarse para siempre en la memoria de quien lo recuerda.