La juventud se ha adueñado de la Selección de Portugal. O más que adueñarse, se ha fusionado a las mil maravillas con la veteranía para empezar a soñar con algo muy grande. ¿Quién podría imaginar que los lusos golearían en octavos del Mundial sin Cristiano Ronaldo? Pues Gonçalo Ramos se encargó de que eso pareciera muy fácil.
El cuadro que dirige Fernando Santos confirmó que sus buenas actuaciones en la fase de grupos no fueron fugaces y que va en serio en busca de la Copa del Mundo. Los lusos, que se enteraron de la clasificación de Marruecos ante España minutos antes de empezar, volvieron a demostrar ese 'fútbol champagne' que deja con la boca abierta.
En la primera gran prueba de fuegp, el campeón de la Eurocopa de 2016 se midió a una siempre correosa Suiza, a la que le apagó el reloj en cuaestión de 17 minutos. Tiempo que tardaron las 'quinas' en abrir el marcador gracias al hombre que se vestió de Cristiano Ronaldo para no solo intentar igualarlo, sino superarlo con creces.
Joao Félix, que fue nuevamente titular y clavó otro partidazo, buscó por dentro a su compatriota, que, sin pensárselo dos veces, se giró y conectó un zurdazo inapelable que se coló por el poco ángulo que dejó Sommer en el palo corto. Una diana que animaron a los lusos a ir a por más, algo de lo que se encargó el veterano central Pepe.
Una de cal y otra de arena, una de juventud y otra de veteranía. Bruno Fernandes se encargó de poner un centro desde el córner y, como en tiempos de antaño, el ex central del Real Madrid se levantó más que nadie para conectar un cabezazo directo a la red. Un golpe que dejó en la lona a un combinado helvético que estuvo a merced de sus rivales.
Un pistolero anda suelto
Con el 1-0, la exhibición Gonçalo Ramos no hizo nada más que comenzar y el punta del Benfica se encargó de acabar con todas las pretensiones suizas nada más salir del descanso. La buena jugada de Dalot por la derecha fue aprovechada por el '26' en el primer palo para certificar el 3-0 y su doblete ante la mirada de todos.
Con su celebración de pistolero, el luso presentó su nombre al mundo y eliminó de golpe al combinado helvético. El asedio portugués siguió su curso natural y un nuevo gran movimiento de Joao Félix abrió los huecos necesarios para que Guerreiro llegara por la izquierda para fusilar a Sommer con un zurdazo cruzado y alto.
Los de Murat Yakin no pudieron hacer otra cosa más que aplaudir ante el aluvión de llegadas, aunque consiguieron el tanto del honor gracias a Akanji. En un error defensivo en un córner, los suizos maquillaron el marcador. Con 4-1, la hinchada clamó la entrada de Cristiano Ronaldo, que se resignó a ver gran parte del choque desde el banquillo.
Antes de dejar su sitio al capitán, Ramos agrandó su noche con el 'hat trick', que surgió de una nueva asistiencia del 'Menino de Oro' y terminó con una picadita sutil llena de calidad para firmar la 'manita'. Tras eso, el trabajo ya estaba hecho y el '7' entró en su lugar en busca de poder firmar un nuevo gol en una Copa del Mundo.
Y este llegó, pero fue obra de Rafael Leao. El habilidoso futbolista del Milan entró para disputar los últimos minutos y volvió a ver puerta, como en el partido ante Ghana, con un derechazo precioso al palo largo. Juego, set y partido para una Portugal que mete miedo y que ya espera a Marruecos en la siguiente fase.