El fútbol le debía una tarde de gloria a Pedro León, quien tuvo que luchar contra las lesiones y contra sí mismo durante demasiados meses. Volvió, pero no fue hasta este miércoles cuando volvió a sentirse el rey de Ipurua. Bajo un manto de agua, en una tarde de las de quedarse al calor de una lumbre, Pedro León echó aún más sal en la llaga del Rayo.
Los de Paco Jémez quedan un punto más lejos de Primera, aunque el costalazo pudo ser aún más severo. Celebrarán los rayistas que el Villarreal dejó escapar dos puntos, que Celta y Huesca no pasaron del empate en un partido esquizofrénico o que el Valladolid o Levante no parecen los equipos más regulares del planeta.
De todos modos, la diferencia en las áreas sigue siendo demasiado grande con respecto a la mayoría de sus rivales. Sobre todo, atrás. Para muestra, el gol de Pedro León. Si ya de por sí es incomprensible que Bebé fuera el que cerrara el desmarque del muleño, aún más flagrante es la bisoñez del portugués para cortar el balón. Un respingo, nula presión. Un regalo para Pedro León.
Era el 73' y el ex del Madrid, que nadie le quite mérito, controló el balón con temple y un gran talento. Lo celebró como si la fuera le vida en ello, evidenció lo que ha sufrido. Hasta ese momento, el partido tuvo diversas fases, aunque a los puntos el Eibar fue mejor. El arranque fue suyo, aunque las dos mejores ocasiones llegaron en pies de De Tomás.
Con el diluvio cayendo sobre Ipurua, Kike García malogró un mano a mano clarísimo con Dimitrievski, que precedió al 0-1. Contra rayista, dejada de De Tomás y golpeo con comba de Pozo. Un golazo en toda regla que sentó muy mal al Eibar, que pidió a gritos el descanso ante la insistencia de un Rayo que quería más.
Sin embargo, el que marcó fue Charles. En el 64', y después de tocar a la puerta del gol, el brasileño cabeceó picado una dejada también de cabeza de Cardona. Quedaba mucho, el Rayo se descompuso y Pedro León elevó el 2-1. En el añadido, una nueva evidencia del problema en las áreas del Rayo. Primero Suárez y después Kakuta perdonaron para que el Rayo quede a seis de su objetivo. El Eibar, el aguerrido Eibar, se empeña el pelear por Europa.