Cuando se dice que Leo Messi es el mejor es por algo. Las condiciones del argentino son increíbles, pero él es el primero en entrenar aquello de su juego que no le convence.
Ya lo hizo con los lanzamientos de falta, y hoy es uno de los especialistas del planeta a la hora de golpear los lanzamientos a balón parado... y también lo ha hecho con los penaltis.
El atacante del Barcelona no era nada fiable desde los 11 metros, pero lleva un año siendo prácticamente infalible. Se le escapó, para gran pena suya y de su país, el de la final de la Copa América, pero con el Barcelona no ha fallado ni uno desde marzo de 2016.
Ahora, Messi no mira al portero. Piensa dónde va a colocar el esférico y, sin apenas mirar a la portería, chuta con fuerza. Se acabaron los chuts con el interior de Messi en los penaltis, ahora siempre golpea con el empeine.
El último que le paró un lanzamiento fue Guaita, el 3 de marzo de 2016, ante el Getafe. Pero en la actual temporada, el argentino tiene plena efectividad y hasta se permite ceder los lanzamientos a sus compañeros, como hizo con Neymar ante el PSG.
En los últimos 7 tiros no ha fallado y esta es su estadística general desde que pateó su primer penalti:
77 TIROS
60 GOLES
17 FALLOS
78% EFECTIVIDAD