Una despedida sin pena ni gloria

Di Santo llegó al Rayo el 1 de febrero, al cierre del mercado invernal, avalado por su buen rendimiento en varios clubes europeos como el Chelsea (2008/2009), Wigan (2010-2013), Werder Bremen (2013-2015) y Schalke 04 (2015-2019).

Su misión no era fácil. Tenía que competir por la titularidad con Raúl de Tomás y a la sombra del madrileño ha vivido todos estos meses. Sin embargo, su escaso protagonismo con Míchel se fue diluyendo aún más con la llegada de Paco Jémez hasta acabar la temporada sin ser convocado en los últimos cuatro partidos.

El argentino, lejos de ese revulsivo que debía ser ha acabado incluso como la tercera opción para la punta de ataque del Rayo, puesto que las últimas semanas Paco Jémez ha apostado por el veterano Javi Guerra, de 37 años, antes que por él.

En total, Di Santo, internacional tres veces con Argentina, ha disputado seis partidos de Liga, solo uno como titular, no ha marcado ningún gol y ha sumado 169 minutos en los que además fue expulsado en una ocasión.

Su vinculación con el Rayo es hasta final de temporada, pero por lo que se ha apreciado en las últimas semanas no cuenta para Paco Jémez, que se queda sin ningún delantero para el próximo curso debido a las marchas también de Raúl de Tomás y Javi Guerra.

El futuro de Franco Di Santo es una incógnita, aunque no descarta quedarse en España. "Si al acabar esta temporada me toca quedarme en España estaré agradecido", dijo a 'EFE' el pasado 17 de abril.

Desde que salió de Chile, en enero de 2008, como última parada en el continente sudamericano, toda su carrera la ha desarrollado en Europa en estos once años y medio. Alemania, Inglaterra y España han sido sus destinos. "Las tres Ligas que más me gustan", confiesa.