En el fútbol, hay que sentir los colores... y esos colores, en LaLiga, son azulgranas y blanquiazules. Barcelona, Huesca, Levante y Eibar representan a los primeros y Alavés, Leganés, Espanyol y Real Sociedad, a los segundos.
8 de los 20 clubes de Primera visten o bien de azulgrana o bien de blanquiazul, siendo estas las grandes tendencias cromáticas de la competición doméstica, seguidas de cerca por el rojiblanco y el blanco.
Atlético, Athletic y Girona representan el trío rojiblanco y Sevilla, Madrid y Valencia, el blanco. Entre ambos se encuentra el Rayo, que al no tener en una medida equiparable el rojo y el blanco, ni ser tampoco blanco completo, no se podría agrupar en ninguno de los dos grupos citados.
En cuanto a los demás colores, el azul (Getafe y Celta) tiene dos representantes y, con sólo uno, se encuentra el amarillo del Villarreal, el verdiblanco del Betis y el blanquivioleta del Valladolid.