San Marino rebosó de ilusión en la previa a su partido amistoso ante San Cristóbal y Nieves. Y diréis, ¿por qué?, ya que se trató de un encuentro sin validez para casi todos, excepto para los locales.
San Marino quería volver a conseguir una victoria 20 años después. La última fue el 28 de abril de 2004 frente a Liechtenstein por un ajustado 1-0. Tras esto, un total de 138 encuentros consecutivos sin vencer (133 derrotas y 5 empates). Por ello, este miércoles era su gran oportunidad para darse un homenaje en forma de victoria ante un rival de similar nivel.
Las cosas se pusieron muy pronto de cara para el cuadro de Roberto Cevoli. En el minuto 21 y aprovechando un penalti, Filippo Berardi colocó el 1-0 en el marcador. Tras esto, el choque se fue igualando y los visitantes lograron la igualada en el 31' por mediación de Terrel.
Antes de que se llegase al tiempo de descanso, Burley desequilibró la balanza y puso el 1-2. El comienzo de la segunda parte no fue mucho mejor para San Marino, que se vio golpeado por un nuevo gol. Esta vez de Panayiotou.
Final del sueño de un San Marino que aumentó su cifra de partidos sin ganar hasta los 139, pero que, sin ninguna duda, tratará de cobrarse la venganza ante el mismo rival este próximo domingo.