Tarde de estrenos en una mala sesión del Chelsea. Con Thiago Silva como titular y capitán, y Kepa castigado en el banquillo, el cuadro 'blue' salvó los muebles en el descuento ante un West Bromwich Albion que acabó por pedir la hora.
Lampard apostó por Caballero ante la ausencia de Mendy y el castigo a Kepa, y le salió mal la apuesta. A los cuatro minutos, Marcos Alonso regaló un balón que acabó en las botas de un Callum Robinson que cruzó el disparo a la portería del arquero argentino.
Noqueado el Chelsea, más lo estuvo cuando Thiago Silva, en su debut, se resbaló y le regaló otro tanto al West Bromwich Albion, que lo aprovechó para marcar Callum Robinson su doblete.
El Chelsea hacía aguas por todos lados. LA apuesta de Lampard no fue positiva y se vio con un 3-0 en contra, todavía con tiempo en la primera mitad, cuando Bartley parecía dejar la victoria en The Hawthorns.
La charla de Lampard al descanso, unido a los cambios hechos en la reanudación, despertaron a la bestia dormida. Quedaban 45 minutos por jugar y tres goles por remontar.
Mason Mount, con un disparo con efecto desde la frontal, dejó en su sitio a un Johnstone que solo pudo ver el balón entrar. Fue el inicio de una reacción que se hizo esperar pero que consiguió salvar un punto.
El segundo tanto, de Hudson-Odoi, metió miedo al West Bromwich Albion, que flaqueaba en defensa y mostraba su camino a mejorar, con once goles encajados en los primeros tres partidos de la temporada.
Cuando los aficionados, en sus casas, del West Bromwich soñaban ya con la victoria, apareció Tammy Abraham para meter el pie en un rechace muerto de Johnstone.
Rescató un punto el conjunto 'blue', que solo ha sumado uno de los seis últimos. Debe reaccionar el conjunto de Lampard tras la gran inversión realizada por el cuadro londinense.