Europa todavía está al alcance del Athletic. El conjunto de Garitano, después de dos empates consecutivos, fue capaz de cerrar una victoria ante un Betis que sigue sumido en depresión y que aún no conoce el triunfo.
Salió dormido el conjunto de Rubi ante un Athletic que entró con hambre. Ya en los primeros minutos tuvo Williams una clara ocasión. pero apareció Pedraza para desviar el balón antes de encontrar portería.
El primer aviso no entró, pero sí el segundo en una jugada con mucha calidad y algo de suerte. Núñez sorprendió al sacar una falta lateral rasa, se la dio a Córdoba, que centró de nuevo raso y apareció Íñigo Martínez para, de tacón, disparar a puerta. El cuero tocó en Bartra para acabar entrando por la escuadra de la portería de Joel.
El golpe, en los primeros minutos de partido, no espabiló a un Betis que fue apático durante la primera mitad. Apenas inquietaron los de Rubi a un Unai Simón que fue un espectador de lujo en San Mamés en la primera mitad.
Solo una jugada aislada de Fekir, en la que se marchó de Unai Núñez, inquietó al Athletic. Pero fue tan rápido el central rojiblanco que le dio tiempo a recuperar y desviar un balón que se marchó por encima de la portería.
Pudo sentenciar Williams en los primeros minutos de la segunda mitad, pero pecó de falta de puntería y Joel le sacó el balón.
Todo cambió con los cambios de Rubi. En esta ocasión sí acertó el técnico del Betis, que introdujo a Tello por la derecha y Álex Moreno por la izquierda para dar más profundiad por las alas.
Puso la atención por fuera pero la mejor jugada llegó por dentro. Un balón filtrado a Borja Iglesias, que le ganó el cuerpo a cuerpo a Íñigo Martínez, acabó con el 'Panda' tirando pero sin superar a Unai Simón y con el central sacando el cuero bajo palos.
El Athletic, al que se le empezó a notar el cansancio, avisó de nuevo con un cabezazo al larguero de Raúl García. Pero el Betis ya se había hecho con el control del balón ante el cuadro de Garitano, que se echó varios metros hacia atrás.
La locura se instaló en los últimos diez minutos, que casi se convirtieron en 20 con el añadido. Unai Simón se convirtió en salvador e Íñigo Martínez casi en verdugo. El portero sacó bajo palos un balón que parecía haber entrado pero que, tras las repeticiones, se vio cómo lo sacó en la línea. El central, por su parte, le clavó los tacos en la rodilla a Fekir en el rechace.
Canales tuvo la oportunidad, desde los once metros, de igualar la contienda. Pero si ante el Granada lo marcó, en esta ocasión echó el balón por encima de la portería. También la tuvo Fekir con una falta lejana, pero Unai Simón voló para sacar el cuero de la escuadra.
Villalibre, que entró en el añadido para perder tiempo, a punto estuvo de firmar un nuevo gol con la espuela, pero en esta ocasión Joel le adivinó las intenciones.
Finalmente fue el Athletic el que se llevó los tres puntos de San Mamés, sigue soñando con Europa y deja al Betis en tierra de nadie, a ocho del descenso y a 13 de Europa.