Tuvo que sentirse presionado el Getafe para recuperar su mejor versión. Ante el Real Madrid y el Barcelona ya demostró que ha cambiado con respecto a hace unas semanas, pero en El Alcoraz se ha confirmado para espantar los fantasmas del descenso.
Se antojaba vital la victoria para los dos equipos, especialmente para una SD Huesca a la que las dos últimas derrotas le han hecho mucho daño. El 'efecto Pacheta' se ha desvanecido un poco y Bordalás reinó en tierras altoaragonesas.
Aunque Ünal fue clave como nunca lo ha sido desde que milita en el Getafe. El delantero turco, siempre puesto en el foco de la duda, respondió cuando más falta le hacía a su equipo para encarrilar la victoria frente a un rival directo. Porque el cuadro azulón se había metido en el hoyo.
Pese al protagonismo inicial de la SD Huesca, que monopolizó los números de posesión, los de Bordalás siempre fueron superiores, con las ideas más claras y el plan trazado a la perfección. Pero es cierto que la fortuna del gol reforzó esa apuesta por el rigor defensivo.
En el minuto 20, Andrés Fernández, titular en la portería oscense, tuvo que despejar un testarazo de Mata y, en el rechace, Ünal estuvo muy listo para aprovechar ese balón muerto y estrenar el electrónico de El Alcoraz. Con el 0-1, todo fue rodado para los madrileños.
Mazazo duro para la SD Huesca, que llevaba una mala dinámica en los últimos partidos. Pero este ha podido ser el peor encuentro para el cuadro altoaragonés, que no compitió en ningún momento y mostró su imagen más pobre en ataque, sin ninguna claridad e impotente frente al muro azulón.
Empeñado en los centros laterales, las bandas no hicieron tanto daño como acostumbran y, por ello, el equipo de Pacheta perdió presencia en ataque. Ni Seoane, ni Ferreiro... tampoco Sandro o Rafa Mir. Ninguno tuvo su día y el choque se acabó convirtiendo en una auténtica pesadilla.
Al descanso, Pacheta trató de reaccionar con un doble cambio para dar entrada a Siovas y Dani Escriche. Pocos minutos después, el segundo jarro de agua fría, protagonizado por el hombre del partido, Ünal, que armó un derechazo sensacional desde lejos para colarlo en el palo largo de Andrés.
Se hundió la SD Huesca, que solo llegó en algunas ocasiones por obra de Rafa Mir. Pero el 0-2 fue una losa muy pesada para Pacheta y los suyos, que se ven amarrados a una zona de descenso cada vez más afianzada. El Getafe sale del pozo y ya ve la luz de la permanencia.