Algo se podía oler Valverde, experimentado entrenador que sabe que en esto del fútbol no hay nada seguro ni escrito. En la rueda de prensa previa al duelo en Anfield quiso poner los pies en el suelo y olvidar el 3-0 a favor para que no hubiera relajaciones. Pidió vivir el presente a sabiendas de que una remontada ante un equipo como el Liverpool no se podía descartar.
Y tras los 90 minutos no hubo demasiadas explicaciones, fue como un punto y seguido a una de las opciones que ya rondaba su cabeza. "Cuando te ganan 4-0 no hay que poner excusas", dijo con la voz de un hombre que ya se sentía señalado.
El equipo azulgrana lo tenía todo de cara y esta derrota ha dejado tocado a 'Txingurri' porque no había nada a los que agarrarse. No fueron Salah ni Firmino, había un gran margen, estaba Messi, la defensa solo había recibido dos goles en 2019 ante los más grandes...
Pero desapareció, el Barcelona desapareció y Ernesto Valverde, como entrenador, es la figura a la que van dirigidos todos los disparos. No logró la motivación necesaria ni la concentración para frenar al Liverpool y se le vio muy lento en los cambios. Hasta la hora no cambió a Coutinho, al que le dejó demasiado tiempo para seguir haciendo nada y confirmar que está siendo un futbolista venido a menos en los últimos meses.
Semedo, Arthur y Malcom fueron las apuestas de Valverde que no lograron surtir efecto en la hazaña final de Klopp y los suyos. Ya son dos remontadas del mismo calado las que ha sufrido Valverde y la segunda podría pasarle factura.
Es cierto que renovó hace unos meses, confiando en que el equipo estaba en el camino hacia un soñado triplete, pero semejante caída puede hacer que la directiva deje de confiar o incluso él mismo no se vea con la capacidad de estar un año más al frente.
Esa ampliación no es de diamante y a 'Txingurri' ya le salvó conseguir un doblete, lo que no quiere decir que vaya a ocurrir lo mismo a finales del mes de junio. Mucho trabajo le quedará al Barcelona en verano y Valverde sabe que la siguiente temporada tiene que ganar sí o sí la Champions. Continuar o no, ahí está la cuestión.