Al Liverpool le crecen los problemas en el parón de selecciones. El primero en dar el susto fue Mohamed Salah, que abandonó la concentración para volver a su club. Ahora le ha tocado a Virgil Van Dijk.
El delantero egipcio abandonó el terreno de juego en el partido ante Suazilandia. El diagnóstico fue un problema en la ingle, aunque no revisitirá mayor gravedad de la que tiene en estos momentos.
La noticia del zaguero holandés cayó en el conjunto 'red' como un jarro de agua fría. Van Dijk anotó uno de los goles ante Alemania (3-0), pero acabó el partido con molestias en una costilla.
Ahora, el central se perderá el encuentro ante Bélgica. No obstante, según informó la Federación de Fútbol de Holanda, su ausencia estaba pactada de antemano, por lo que Ronald Koeman no podrá contar con él.