El primer ‘match-ball’ por la liga llegará la semana que viene, tras el empate del Basilea en su visita al Sion. El equipo valesano, que jugó la última final copera ante su hoy rival, volvió a sacar los dientes y le arrancó un punto al conjunto ‘rotblau’.
El hombre del partido fue el holandés Ricky Van Wolfswinkel. A los once minutos ya había puesto por delante al Basilea. Tras una sequía goleadora de unos dos meses, lleva dos goles en once días. Con este tanto, adelantó a los suyos en el estadio del Sion.
Sin embargo, en torno al descanso se mascó la tragedia para los azulgrana. Antes del parón el portugués Carlitos, de 35 años, puso el empate. Y después, Suchý confirmó la remontada con un gol en propia. El checo, que no lleva unas buenas semanas, complicó al Basilea.
Pero Van Wolfswinkel no se había rendido. El ex bético dio vida a su equipo con la réplica al 2-1 del Sion, que llegó a los cinco minutos. El marcador no se movió, y el resultado repartió los puntos dejando diferentes impresiones entre los equipos.
El Basilea es segundo con 59 puntos, y podrá perder definitivamente un título liguero que se llevará el Young Boys. Mientras tanto, se medirá al Thun. El Sion, que suma un punto que le saca del descenso, hará lo propio con el FC Zurich.