El Real Madrid desea, más que nada en este mundo, vestir de blanco a Mbappé. Pero la realidad es otra, y es que en estos momentos el club 'merengue' no puede acometer un fichaje de ese calado. Tiene que vender, aunque eso implique desprenderse de jugadores tan importantes como Varane.
Parece que es cuestión de horas que Raphaël Varane se convierta en nuevo jugador del Manchester United. Abandonará el Madrid tras media vida en el club, pero dejando 55 millones de euros.
55 millones que, de acuerdo a 'Marca', se destinará a intentar fichar a Mbappé. Pero las cuentas siguen sin cuadrar. El joven delantero galo es un fichaje de tres cifras (se habla de 180 millones de euros), y luego está su salario (20 'kilos' netos).
Tiene que aligerar masa salarial el Madrid, y además recaudar dinero con ventas. Y no es que tenga muchos más jugadores de los que desprenderse por una cantidad notable, no al menos que no sean imprescindibles, como Courtois o Casemiro.
Se avecina otro verano sin fichajes en la 'casa blanca' (más allá de la llegada a coste cero de Alaba), salvo que resulte imposible fichar a Mbappé. Solo entonces, de acuerdo al citado medio, este dinero reservado para el jugador del PSG se invertirá en refuerzos.