Si te considerabas un despistado, probablemente respires más tranquilo después de ver lo que le pasó a este guardameta. Graeme Smith, portero del Brechin City, debe de serlo porque ¡recorrió 130 kilómetros antes de darse cuenta de que estaba dirigiéndose al destino equivocado!
Smith está siendo el protagonista de la semana, no por haber hecho alguna parada espectacular o por alguna acción curiosa dentro del terreno de juego, sino por haber recorrido esta distancia en coche hasta el estadio donde creía que jugaba su equipo, antes de darse cuenta de que el encuentro no era allí, sino ¡en su propio estadio!
El meta, de 32 años, está siendo el objeto de burla de todo el Reino Unido e incluso ha llegado a salir en la hora punta de los telediarios del país. Smith logró llegar a su campo antes del comienzo del partido, aunque sólo tenía una hora y cuarenta minutos para volver y prepararse para el encuentro. Para su desgracia, allí estaban sus compañeros para mofarse de su error.