José Luis Caminero, director deportivo, y el todavía técnico malaguista ya han intercambiado pareceres por dos veces de cara a la próxima temporada. Y de esta segunda reunión, la conclusión es clara: Víctor quiere un equipo competitivo para pelear por la parte alta.
La continuidad del club en Segunda, tras caer eliminado en la semifinal del 'play off' ante el Deportivo, le hará atravesar una situación económica más difícil que en la temporada recién finalizada. No contará el club con la ayuda al descenso y, por ello, deberá reducir la masa salarial para adaptarse al límite que establece LaLiga.
El entrenador es consciente de ello y asume la nueva realidad. Eso sí, pese a estas nuevas normas, exige para seguir unas armas que, al menos, le hagan luchar por el objetivo hasta el final.
Víctor, tras la eliminación en La Rosaleda, ya dejó claro su deseo de seguir en el club, pero ya entonces remarcó la importancia del proyecto en su decisión final. Una decisión que no debería demorarse mucho más en el tiempo.