Aleix Vidal ya no es jugador del Alavés. Tras acabar su cesión en el cuadro vitoriano, el futbolista se defendió a las acusaciones que alguna vez ha recibido por su carácter.
"Soy como soy y no voy a cambiar", dijo tajante, y aseguró haber terminado "contento" su paso por Mendizorroza.
"Los números que siempre demuestran mi compromiso están ahí", presumió antes de explicar por qué ha podido jugar tan poco tras el confinamiento.
A sus 30 años, solo ha participado en cuatro partidos de la recta final, sin completar los 90 minutos en ninguno: "Fui franco con el míster. Le expliqué que no podía darle el rendimiento que quería y que prefería no restar".